Servicio de Salud Arica y Hospital Regional realizaron talleres “Ponte en mi lugar” para equipos de escuelas municipales

Arica, 16 de agosto de 2019. Profesionales del centro de salud mental comunitaria Norte y del equipo de siquiatría y salud mental ambulatorio (ESSMA) Sur del Servicio de Salud Arica (SSA) realizaron talleres con inspectores y encargados del programa de integración escolar (PIE) y de convivencia escolar, de establecimientos educacionales de la Municipalidad de Arica, para sensibilizarlos en el apoyo a niñas y niños en tratamiento por patologías de salud mental.

Las actividades, llamadas “Ponte en mi lugar”, fueron organizadas por los equipos de participación social del SSA y del Hospital Regional de Arica Dr. Juan Noé, el 12 y 13 de agosto, en el marco de una estrategia de vinculación con la comunidad usuaria de la red asistencial de Arica y Parinacota.

Carolina Letelier, trabajadora social de la línea infanto juvenil del ESSMA Sur, explicó que las jornadas buscaron reforzar el trabajo intersectorial, en la medida que los pacientes de los centros de salud mental ambulatorios son también alumnos y es necesario que las comunidades escolares colaboren en el seguimiento de las indicaciones terapéuticas y en el buen manejo de las situaciones de crisis.

Respecto al nombre “Ponte en mi lugar”, la profesional manifestó que los talleres tuvieron como objetivo central generar empatía con las niñas y niños, ponerse en el lugar del otro, sentir lo que sienten los niños, evitar el uso de etiquetas vinculadas a los diagnósticos de enfermedades y discutir sobre los mitos y realidades vinculados a la salud mental.

Letelier dijo que este trabajo es vital, ya que “gran parte de las descompensaciones que tienen, las viven en los colegios y las viven ahí por un montón de factores, y dependiendo también del diagnóstico, por temas ambientales, los otros niños y las figuras de autoridad”.

Acotó que esto también se cruza con el imperativo de garantizar el derecho a la educación de todas las niñas y niños y, por lo tanto, la necesidad que las comunidades educativas adapten los currículos a las necesidades de cada paciente en tratamiento.